El Amor Espera

El Amor Espera Capitulo 15 4/??

Heyyyyy =)

Como le va a todo mundo??

List@s para comenzar una nueva semana???

Les deseó un buen comienzo de semana, y bueno

Esta es oficialmente mi última semana

De vacaciones =(

Este verano lo disfrute muchísimo….

Asi que no me quejare =)

Un saludo y abrazo a todo aquel que visite este espacio =D

Gina se encogió de hombros, no estaba segura si quería que Ashleigh se enterara de lo mucho que había sufrido. Como le había dicho, ¡eran unas niñas! ¿En verdad esperaba que estuviesen juntas para siempre? Pues, ¡Sí!, en su momento si. Así que, trato de explicárselo nuevamente.

“Sabes, trate de ser yo la que tomara la decisión y así dejarte libre,” dijo Gina. “Pero déjame decirte algo, el dolor que sentí ese día aun sigue ahí,” admitió ella. “Si tuviese que hacerlo de nuevo, esta vez haría que tu vinieses a mí y que tu terminaras las cosas conmigo.”

Ashleigh se puso de pie rápidamente, haciendo a un lado su silla. “No sé de qué demonios me estás hablando, pero si estas tratando de voltear las cosas y convertirme en el chico malo de la película, para de alguna manera culparme por lo que sucedió, pues……estas muy desquiciada,” dijo antes de retirarse.

Gina observo cómo se marchaba, esperando verla salir del bar completamente, pero Crissy la intercepto, llevándosela para que hablase con otra pareja que acababa de llegar. Se recordó así misma que Ashliegh había sido la presidenta de su generación, que había sido votada como la más popular….y que todos esperaban que ella hablase con todos los ahí presentes. Que se acordase de todos. Pero Gina reconoció los hombros cuadrados, y la espalda recta. Sonrió. ¡Oh si!, Ashleigh estaba enojada. Alzo su vaso y brindo en silencio. La conversación civilizada que había previsto se había convertido demasiado pronto en ofensiva, sorprendiéndola un poco. Veinte años habían transcurrido, seguro, pero ellas seguían teniendo esa pasión entre ellas.

Era una pena que ahora solo involucraba enojo en vez de amor.

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Ashleigh finalmente se le escapo a Crissy, dirigiéndose hacia la barra por otra bebida. Sabía que Gina seguía sentada en la mesa….sola. Y maldita sea si tan solo no siéntese pena por ella. Eso le recordaba a Gina en la preparatoria; a Gina fuera de su círculo social, observándolos desde afuera. Eso fue hasta que ellas…pues, hasta que ellas se hicieron amigas. Y posteriormente novias.

“¿Tu eres la del whiskey doble? ¿Y la de las cosas buenas?” Limpio la barra donde ella estaba, sonriéndole de una manera coqueta que Ashleigh no soportaba. “¿Quieres otra?”

Claro que, coquetearle significaría que el tenia realmente cosas buenas. “La veinteava reunión de nuestra clase. ¿Tú qué crees?” Le pregunto guiñándole un ojo. “¿Necesito una más?”

“O dos.” Dijo el inclinándose hacia ella. “Y juzgando por el gentío, mejor escondo la botella para ti solita.”

Ashleigh en vez de buscar una manera ingeniosa para contestarle, puso un billete de veinte dólares con la esperanza de que la propina fuese suficiente. Él deslizo su bebida hacia ella. “Eres un buen hombre. Deséame suerte,” murmuro ella mientras se daba la vuelta, con una bebida fresca en mano.

¡ah!, ¡maldita sea! si tan solo su mirada no la llevara de nuevo hacia Gina. Pero esta vez, no, se negaba a ir hacia ella. Y francamente, ¿Qué era esa basura que Gina le estaba escupiendo sobre sentirse culpable? Ashleigh sabía que no tenía razón para sentirse culpable de nada. Maldita suerte, Gina fue la que ---fuera de la nada--- había decido que ellas necesitaban expandirse, necesitaban ver a otras personas, necesitaban experimentar.

“Pura mierda,” murmuro.

“¿Disculpa?”

Ashleigh se giro, sonriéndole a… ¿Sherry? No, maldita su suerte, ¿Cuál era su nombre? ¿Janie? Frunció el ceño, a sabiendas que ya casi tenía el nombre en la punta de su lengua.

“Soy Debra. No esperaba a que me recordaras. Yo---“

“Teníamos Química juntas,” dijo Ashleigh, esperando que su memoria no le fallara. Cuando la otra mujer sonrió, supo que no se había equivocado.

“Si te acuerdas. Si. La clase del profesor Arnold. No vine a la decima reunión así que pensé en venir a esta.”

“Me alegra que hayas venido. Hay mucha gente este año.”Ashleigh suspiro, no queriendo ser ruda, pero no quería hablar con esta mujer que ni siquiera conocía. Por supuesto que, en ese momento, su alternativa era Gina, quien se dirigía en ese momento hacia la barra.

“¿Ella es Gina Granbury, no es así?”

Ashleigh asintió con la cabeza. “Si.”

“Ustedes eran mejores amigas, ¿no es así?”

“Si lo éramos.” Ashleigh miro a su alrededor, tratando de buscar una ruta de escape. No estaba segura de poder comportarse civilizadamente con Gina en ese momento.

“¡Caray! Ella es…”

Ashleigh se giro hacia ella. “¿Ella es qué?”

“Hermosa. Quiero decir, ¡wow! Mira a nuestro alrededor. Casi todos nosotros nos vemos viejos y casados. Pero ella---“

“¿Disculpa?”

“Perdón. No me refería a ti precisamente.” Sonrió Debra. “¿Estas casada?”

“No.”

“¿Divorciada?”

“No.”

“¿Oh?” Frunció el ceño. “Espero no seas una de esas personas que renuncian al matrimonio para solo irse a vivir juntos. Dios creó el matrimonio por alguna razón. Es el pegamento que mantiene a las familias tradicionales juntas, que pasaría si el matrimonio no existiera---“

Ashleigh alzo una de sus manos, haciéndola parar de hablar. “Debra, soy gay. No estoy muy interesada en escuchar tu discurso sobre los valores familiares.” Bien, entonces seria ruda. “Creo que eso está muy sobrevalorado. Es pura mierda.”

Los ojos de Debra se abrieron como platos mientras daba un paso hacia atrás. “¿Eres… eres gay?”

Ashleigh asintió. “Si. Bastante.”

Debra dio un paso más hacia atrás, después vio hacia Gina quien finalmente estaba en la barra. Debra las volvió a mirar a las dos, y dio otro paso más hacia atrás. “Tengo… tengo que irme.”

“Seguro. Fue un placer verte de nuevo.”

Debra salió volando y Ashleigh se giro hacia Gina. “Debra o algo así.” Hizo un movimiento con su mano para quitarle importancia. “Solo le dije que era gay.”

“Eso explica la mirada de terror en su cara.” Sonrió Gina. “¿O acaso le tiraste los perros?”

“Como si lo hubiese hecho. Estaba a punto de darme un discurso sobre los beneficios de un matrimonio tradicional y a punto de decirme todo sobre los valores familiares. Estaba a punto de vomitar.” Después se giro. “¿Y tu qué putas estás haciendo aquí? No quiero hablar contigo en este momento.