El Amor Espera

 

El Amor Espera Capitulo 10

Hola chicas :)

ya estoy aqui nuevamente.

Espero sigan por ahi.

y bueno pues nada las dejo con

este capitulo que no es muy largo..

pero el que viene esta laaargooo...

Aissa creo que a ti te va a gustar

saber que se trata de 5 paginas...y bueno no se si hacerlo en dos o mas

partes...pero si es asi no sabria donde cortarlas para subirla...jejeje

ya veremos como sale.

Saludos y hasta pronto!!!

Presente

Gina acelero a todo dar por la carretera, el viento le revoloteaba el cabello debido a que llevaba la ventana de su Jeep abierta, mientras abandonaba Corpus Christi y se dirigía hacia la calzada. La isla era el lugar donde ella normalmente iba cuando necesitaba pensar, cuando un diseño o una propaganda musical la eludían, o cuando solo necesitaba estar a solas.

Como ahora.

Giro hacia la carretera del parque estatal, mostrando su pase anual en la entrada. La encargada le hizo la señal de pasar sin siquiera mirarla. A estas alturas ya todos conocían su nuevo Jeep. Era un miércoles a principios del mes de mayo y el parking que se usaba para el día estaba casi vacío. Aparco en su lugar habitual debajo de las palmeras y salió de su carro, llevándose consigo una botella de agua mientras caminaba.

Se dirigió hacia el sur, sus pies descalzos se enfriaron por las olas que chapoteaban en la orilla de la playa, para después regresar mar adentro. Tomando una bocanada de aire húmedo y salado, dejo que su mente divagara donde quisiera mientras ella caminaba sin rumbo fijo, escuchando los sonidos de las gaviotas y las aves playeras mientras venían a inspeccionarla con la esperanza de recibir comida.

No se sorprendió cuando se encontró así misma viajando atreves del tiempo. Era algo que había estado haciendo desde el mismo día en el que recibió la maldita invitación para la veinteava reunión de ex alumnos. No sabía porque le había afectado tanto. Cuando la invitación para su decima reunión le llego, la miro, se encogió de hombros, y la tiro al basurero, sin dedicarle ningún otro pensamiento. Claro que, hace diez años ella seguía disfrutando de la libertad de la vida en Austin, saliendo con estudiantes con postgrados, siguiendo la vida de la escena musical o relajándose en un lago con un grupo de amigos ruidosos. Estaba contenta trabajando para alguien más, aprendiendo más sobre su carrera en una de las más grandes agencias de publicidad de la ciudad, dándolo todo en su horario de 8 de la mañana a 5 de la tarde, para después olvidarse de todo hasta la mañana siguiente. En ese entonces, ella aun seguía en sus días de “hija de puta”, como le decía Tracy.

No estaba segura cuando fue exactamente que maduro y se dio cuenta de que ya no tenía 21 años. Tal vez fue en uno de los muchos días de resaca, o una de las muchas mujeres desconocidas en su cama, o tal vez una de las tantas noches insatisfactorias.

O quizá simplemente se canso de huir. Porque eso era lo que había estado haciendo. Huyendo de su vida, huyendo del fantasma de Ashleigh, huyendo de un amor perdido hace mucho tiempo. Huyendo de sus recuerdos.

Fue puro accidente el haberse encontrado con Tracy, su antigua amiga del college. Ambas se habían ido de San Marcos el día después de su graduación, Tracy dirigiéndose a casa en Corpus y Gina dirigiéndose hacia Austin. Siguieron en contacto esporádicamente, finalmente distanciándose cuando nuevos amig@s tomaron sus lugares. Nunca se imagino encontrársela en una tienda de comestibles aquella tarde. Se pusieron al día y siguieron con su amistad tal como antes; Tracy invitándola a que visitara Corpus para que conociera a su esposo e hijos. Esa visita fue todo lo que necesito para convencer a Gina de que abandonara Austin. La paz que había estado buscando---la encontró ahí, en la playa. El único lugar que guardaba los recuerdos más preciosos para ella.

Pauso su caminar, mirando hacia el golfo, reflexionando sobre el pasado como lo había hecho las últimas semanas. Se preguntaba cual sería la reacción de Ashleigh si supiera que Gina se había establecido aquí, teniendo a Mustang Island como su lugar de distracción. Habían estado ahí dos veces juntas, la primera fue el verano antes de su tercer año de preparatoria y nuevamente el verano antes de comenzar su último año de preparatoria. Claro está, que para el segundo verano ellas ya eran novias, escondiéndose en cualquier lugar para poder estar juntas. Pero era el primer verano el que ella recordaba más. Ese verano fue todo un descubrimiento, de amor y deseo, de una nueva amistad que se convirtió en algo más al término de la semana. Porque eso fue todo lo que se tomo. Una corta--- una increíble--- semana para enamorarse profundamente de Ashleigh Pence.